domingo, 24 de marzo de 2024

Café Ufológico RIO54 de marzo: ENCUENTROS, REENCUENTROS Y DESPEDIDAS


Nuevamente en el patio descubierto de la pizzería La Guitarrita, situada en Av. La Plata 225, a 2 cuadras de Av. Rivadavia y de la estación Río de Janeiro de la línea “A” de subterráneos, se realizó la reunión de marzo del Café Ufológico RIO54, continuando las reuniones mensuales consecutivas iniciadas en 2010 en el inolvidable Café De La Subasta.


Asistieron este 7 de marzo Adriana Urrutia, Karina López, Mariano Lioy, Daniel Kane, Alberto Kane, Jorge Batista, Edgardo Stekar, Roberto “Trebor” Figueroa, Fernando Lefevre, Alberto Portalet, Nilva Macedo, Jorge Fmil, Gustavo Ibáñez, Alejandro Merel, Javier Stagnaro, Patricia Paillasse, Hernán Saban, Leandro Ferron, Carlos Margareto, Claudio Petrini, Elías Pesaj, Fabián Rambelli, Antonio Pérez, Horacio Sorbaro, Stella Maris Zaquinia, Pablo Rosello, Hugo Sampayo, Miriam, Elizabeth, José A. Marengo, Viviana Fernández Juárez, Yolanda, Rubén Calabrese, Lucho Mendoza y Carlos Trejo con la coordinación habitual de Mario Lupo y Rubén Morales.


El resumen del encuentro anterior (febrero) publicado en este mismo blog, se titulaba “Siempre hay que estar preparado para lo imposible” y ese título cobraría un sentido inesperado un mes después. Volveremos sobre el tema al final del presente resumen.


La reunión de marzo recuperó la masividad de concurrencia de los tiempos previos a la pandemia, volvieron amigos y amigas que no veíamos desde aquellas épocas, así como hubo varios participantes que llegaron por primera vez a las mesas de RIO54 y se les dio la cordial bienvenida.


Rubén Morales, co-coordinador de RIO54
Los coordinadores abrieron la conversación dando un cordial saludo a los presentes, en particular Rubén recordó algunas de las buenas costumbres del Café Ufológico, por ejemplo que se trata de reuniones públicas pero no anónimas, de modo que cada asistente pueda saber al lado de quien estuvo sentado, con quienes dialogó, para después establecer lazos de colaboración y amistad entre quienes descubran tener afinidades comunes. Por eso luego nombró uno por uno a los presentes, tras lo cual Mario Lupo tomó la palabra para afirmar el concepto de que RIO54 no es un “grupo” sino un “espacio” donde podemos hablar libremente para expresar los criterios de cada uno, “es muy lindo convivir entre ideas diferentes, eso produce un gran aprendizaje”. Finalmente dijo “Recuerden que RIO54 existe porque ustedes están presentes, si así no fuera RIO54 dejaría de existir. A cada uno de ustedes ¡Gracias y bienvenidos!”


Acto seguido comenzaron las presentaciones de quienes por primera vez se acercaron al Café Ufológico RIO54 porque como alguna vez ha dicho Alejandro Dolina “En la vida hay grandes amigos que uno todavía no conoció”.


Trebor hace uso de la palabra.

En primer lugar se presentó “Trebor”, técnico electrónico, de Merlo (zona oeste del Gran Buenos Aires) vino junto con su amigo Edgardo Stekar, un habitual participante de RIO54, ya que ambos comparten la conducción del programa Café Ufológico por radio Contacto. 


Hace 50 años, Trebor tuvo su primera observación ufológica junto a su familia en Ballesteros, Córdoba. Ya su padre le había relatado que siendo niño, desde ese mismo pueblo, había visto tres esferas que se desplazaban a ras del campo, en la lejanía, cambiando de colores.


Presentación de los hermanos Kane.

Daniel Kane, dibujante, siempre se interesó por el tema ovni a través de las películas y revistas, lo mismo que su hermano Alberto. Cierta vez, en la década de 1990, cuando viajaban en el tren que salía de Mar del Plata, a poco de salir, pasadas las 19 hs, vieron una secuencia de luces que se disparaban verticalmente desde la tierra al cielo. Mario Lupo especuló que podría tratarse de bengalas lanzadas durante maniobras militares de entrenamiento. 


Daniel continuó, expresando que lo había impactado el incidente de Varginha, Brasil, sucedido en enero de 1996, referido a varias mujeres que se asustaron al ver merodeando a un ser muy extraño que se movía con dificultad, era de baja estatura, cabeza grande y cuerpo muy delgado. Se dijo que luego fue capturado por miembros del ejército, versión que sigue sin comprobarse.


Mario, Nilva, Karina, Trebor y Edgardo

Mario Lupo y Javier Stagnaro aportaron detalles, recordando el papel decisivo del recordado ufólogo brasileño Ademar Gevaerd en la difusión internacional del caso. Fueron mencionados también los trabajos de Pablo Villarrubia Mauso acerca de los dramáticos sucesos acaecidos en el área de la Isla Colares do Pará, en la desembocadura del Río Amazonas, acerca de rayos de luz que atacaban a las personas, causándoles serias lesiones en la piel. 


Habla Fernando Lefevre
Fernando Lefevre evocó el caso sucedido en Araçariguama, cerca de Sao Paulo, Brasil, el 4 de marzo de 1946, cuando Joao Prestes Filho fue alcanzado por una luz venida del cielo tras lo cual su cuerpo fue invadido por una especie de lepra fulminante que en muy poco tiempo acabó con su vida.


A todo esto, Rubén Morales, mitad en serio y mitad en broma, pidió por favor que cambien de tema, señalando que había historias más agradables para contar en una reunión de café.


Pablo y Stella Maris hicieron su primera participación en el Café Ufológico RIO54. Stella Maris se declaró encantada de compartir estas cosas con un grupo así. A los 15 años tuvo su primera observación ufológica que la llevó a interesarse en el tema y luego vinieron diversos avistamientos, el último de ellos en Capilla del Monte, pocos días antes de nuestra reunión, de una luz puntual que se movía sobre los cerros.


Pablo ratificó que la luz se desplazaba a gran altura, mucho más rápido que un avión, no tenía las clásicas luces estraboscópicas de los aviones, y hacía cambios de trayectoria. 


Añadió que en 1993 había ido con tres amigos a pescar a Roque Pérez, por la ruta Nº 29 que se veía totalmente iluminada por la luna llena. Fue entonces que los cuatro vieron un fenómeno muy extraño, el cual lo llevó a pensar que eso era algo de origen humano, acaso hecho por humanos del futuro que viajan en el tiempo. Aunque estos temas no lo apasionan mayormente, felicitó a todos los reunidos en el café por convocarse a conversar en un clima de tan buena onda.


Fabián Ferrón y Mariano Lioy

Miriam se presentó relatando, como muchos lo han hecho también, que su primera visión de algo extraño  fue en su infancia. Aquella experiencia de niña fue muy especial, estaba con sus padres en Salsipuedes, un pueblo serrano de Córdoba, ella tenía entre 6 y 8 años. Recuerda haber visto delante suyo una gran luz de colores que giraba, luego de lo cual perdió la noción del tiempo, sus padres comenzaron a buscarla, no la encontraban por ninguna parte, hasta que por fin la localizaron y el episodio quedó signado como una incógnita familiar. Refirió que luego ha tenido otros eventos muy movilizadores, en diferentes lugares, son hechos que se dan en la medida de que la conciencia se va expandiendo, recibiendo más información -explicó. 


Claudio Petrini se manifestó simplemente como interesado en el tema, satisfecho de escuchar testimonios que le resultaron enriquecedores y prometió volver!


Hechas las presentaciones, la conversación se volcó hacia temas científicos, tecnológicos y aeronáuticos, con valiosas aportaciones de Margareto, Edgardo, Trébor, Mariano y Leandro:


Carlos Margareto refirió que cuando trabajaba en Brasil, un científico de la muy prestigiosa Universidad de Sao Paulo (USP) le contó una interesante anécdota. Este hombre de ciencia dirigía una importante empresa de microchips en Sao Paulo hasta que le cerraron la fábrica por cuestiones políticas. Desencantado, se dedicó a viajar por diversos países, trabajó en Japón y luego en un laboratorio de Estados Unidos, hasta que un día quiso volver a su país porque extrañaba los amigos, la cerveza, la intensa vida social brasileña. Entonces su jefe lo llamó aparte y le dijo que antes de tomar esa crucial decisión debía conocer un laboratorio militar al que muy pocos tenían acceso. Con gusto realizó esa visita, en la cual un gerente del laboratorio le explicó que allí desarrollaban proyectos que adelantaban 50 años, por ejemplo tecnologías para la teletransportación de objetos. El científico brasileño también pudo ver con sus ojos unos motores de antigravedad que estaban en etapa de ensayo. Finalmente concluyó que cuando se dieran a conocer esos avances tecnológicos sería necesario replantear las nociones de física y de matemáticas que se enseñan oficialmente.


Por su parte, Mariano Lioy informó que la NASA acaba de perder contacto con la sonda espacial Voyager I que fue lanzada hace 47 años, la cual ya hace tiempo ha dejado atrás el sistema solar para internarse en el espacio interestelar llevando consigo un disco de oro con grabaciones, imágenes y mensajes de la Tierra, un conjunto de datos que podría ser descifrado por una eventual cultura extraterrestre, proyecto que fue dirigido por el recordado astrónomo y divulgador científico Carl Sagan. 


Edgardo Stekar se mostró orgulloso de haber podido entrevistar junto a Trebor al científico argentino Fabricio Alcalde Bessia, doctor en Ciencias de la Ingeniería por el Instituto Balseiro e ingeniero en Electrónica por la UBA, quien trabaja en colaboración con el Fermilab de Estados Unidos en el denominado “Proyecto Oscura” que permitirá obtener las primeras imágenes cuánticas de la materia oscura del Universo gracias a un chip desarrollado por Alcalde Bessia. Recordemos que se denomina materia oscura a un componente presente en todo el Universo que no emite luz y -hasta ahora- solo puede detectarse por su efecto gravitacional.


El técnico aeronáutico Leandro invitó a una Convención de Vuelo Experimental a realizarse en el Aeródromo de General Rodríguez, donde se ponen a prueba aparatos voladores muy originales, algunos provenientes de otros países. Destacó también que en estos eventos suele haber avistamientos no convencionales, recordó que en una Convención que tuvo lugar en la Base Aérea de Morón en 1999 todos vieron lo que parecían ser 12 globos blancos unidos, aunque por momentos contaron 17, e incluso salieron dos aviones en su búsqueda, sin resultado.


Toda esta información, todos estos detalles contados en este resumen, son solo parte de lo que se dijo en este apasionante  Café Ufológico RIO54 realizado el 7 de marzo de 2024.



Trebor Figueroa y Edgardo Stekar en RIO54

Pocos días después recibimos la muy triste y totalmente inesperada noticia de que el amigo Edgardo Stekar había fallecido estando en su casa, en la zona oeste del Gran Buenos Aires, en la tarde del 13 de marzo. Tenía 66 años, había nacido el 12 de diciembre de 1957, era un participante asiduo del Café Ufológico RIO54 lo que lo llevó a crear un programa al que denominó “Café Ufológico”, emitido los domingos por Radio Contacto de San Antonio de Padua, en el cual fueron entrevistados numerosos referentes del tema ovni. La causa de su deceso habría sido peritonitis, según una publicación en Facebook.



Diego Golía, en una de sus visitas a RIO54
También nos conmovió enormemente enterarnos que el 11 de enero había fallecido Diego Golía, otro querido amigo del Café Ufológico RIO54 que se domiciliaba en General Rodríguez. Era paracaidista, se destacaba por su simpatía, su buena onda, sus prudentes intervenciones en el café y al fin de cada reunión tenía una especial capacidad para resumir en pocas palabras lo esencial que había dicho cada participante.



Al principio recordamos que el título del encuentro de febrero fue Siempre hay que estar preparado para lo imposible”, y en la incierta categoría de lo imposible se cuenta la inesperada partida al más allá de Edgardo y Diego. Duele ver que se han ido dos de los nuestros. QEPD para ambos y buen viaje sideral queridos Diego y Edgardo.


Por eso hemos titulado este posteo: “Encuentros, reencuentros y despedidas”, las despedidas son inevitables, escapan a nuestro control.  En cambio, depende solo de nuestra voluntad multiplicar los encuentros y los reencuentros entre amigos y amigas unidos por un tema en común. Por eso el Café Ufológico como “espacio” de reunión presencial, de encuentro cara a cara, de charlas amenas, de compartir la mesa, los debates y el buen humor, es el ámbito ideal para seguir encontrándonos, para seguir aprendiendo, para seguir cultivando la amistad. 


Larga vida a los cafés ufológicos y nos encontramos (y reencontramos) en el próximo mes de abril. Hasta entonces!

domingo, 25 de febrero de 2024

Café Ufológico RIO54 de febrero: “SIEMPRE HAY QUE ESTAR PREPARADO PARA LO IMPOSIBLE”


El jueves 1° de febrero el Café Ufológico RIO54 volvió a reunirse en el patio descubierto de la pizzería La Guitarrita, situada en Av. La Plata 225, a 2 cuadras de la Av. Rivadavia y de la estación Río de Janeiro de la línea “A” de subterráneos.


Debido a la ausencia vacacional del co-coordinador Rubén Morales en la ciudad de Capilla del Monte, la coordinación estuvo a cargo de Mario Lupo que llegó, con denodada responsabilidad, una hora antes del comienzo oficial de las 18:30, sufriendo el acoso de inquietantes preguntas ufológicas por los primeros concurrentes en arribar.


En esta oportunidad compartieron la charla en las mesas del Café Ufológico RIO54 Luis Baynham, Karina López, Mariano Lioy, Daniel Tassat, Lali Alvarez, Gustavo Ibáñez, Alejandro Merel, Javier Stagnaro, Patricia Paillasse, Carlos Spinelli, Sebastián Araya, Hugo Sampayo, Estela González, Virina Griffith y Carlos Trejo.


Fue el primer encuentro presencial de 2024, ya que la reunión de enero se desarrolló de manera virtual para dar continuidad en período de vacaciones a las reuniones mensuales sucesivas iniciadas en el año 2010.


Carlos Trejo, Estela González, Virina Griffith, Hugo Sampayo 

En principio se le dio la bienvenida a Virina Griffith, quien participó por primera vez en nuestras reuniones, luego Karina se refirió a su reciente visita a la Isla Martín García y su nocturna caminata hacia el cementerio de desasosegadas lápidas inquietas, entre el zumbido del viento y los ecos de posibles pisadas. Mario añadió que hay un pista de aterrizaje del otro lado e la isla, en la llamada Zona Intangible, custodiada por Prefectura.



Daniel Tassat y sus reflexiones

Daniel preguntó a Karina si su experiencia podría clasificarse como trascendental. La respuesta fue que la de esa noche no, pero a la siguiente, pasando las lomas tras el cementerio, observó una luz que titiló tres veces y se desplazó a la derecha y hacia arriba.


Esa descripción hizo recordar a los trabajos académicos de Diego Escolar y su documento de reconocimiento mundial, escrito en el año 2012 sobre sus experiencias con “luces malas” en el campo (IANIGLA: Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas - Universidad Nacional de Cuyo).

Habla Karina López, Mariano Lioy detrás


La sabia voz de Luis colacionó: “siempre hay que estar preparado para lo que parece imposible”, regalándonos el mejor título para el presente resumen.


Daniel continuó: “yo había visto el blog de Río54 y me interesó sobre todo, conocer en persona a los participantes, dado que descubro que la mayoría, sino todos los relatos tienen una naturaleza emocional; a mí, en particular, me interesa la vivencia personal pero sin intentar descartar el contexto emocional, tamizando el relato para ver qué queda.”


Suele denominarse “wishful thinking” (pensamiento ilusorio) a la formación de ideas, creencias, que motivan a tomar decisiones en función de lo que se cree, de lo que se imagina puede generar felicidad, en vez de apelar a la evidencia, la racionalidad o la realidad. Y no necesariamente este proceso conduce a malas decisiones, por caso, hay personas que llevadas por sus creencias compraron terrenos en determinadas “zonas mágicas” y su inversión se convirtió con el tiempo en un brillante negocio inmobiliario.

Lali Alvarez y Gustavo Ibáñez.


Mario reafirmó que toda experiencia extraordinaria contiene una gran componente emocional que suele ser compartida por quienes escuchan el relato. De hecho, se apoyó en una frase comúnmente utilizada por los partícipes de estas experiencias shockeantes: “es como si hubiese estado en un sueño” y concluyó que “puede hablarse de un alto porcentaje emocional en los episodios ufológicos”.


Este análisis paradojal merecía un silencio reflexivo, la brisa de la tarde refrescaba a los participantes al fin de esa calurosa jornada, mientras desde los balcones de los edificios linderos, algún que otro vecino indiscreto intentaba escuchar los diálogos de aquel singular grupo.


El valioso silencio introspectivo fue roto cuando alguien comentó que el astrofísico estadounidense Joseph Allen Hynek definía la Alta Extrañeza como “una medida de rareza sobre determinados hechos reportados en los casos ovni, cada uno de los cuales es difícil de explicar en términos del sentido común” y que más tarde su discípulo Jacques Vallée, recogió el guante y como buen informático asoció ambos temas: “los avistamientos de Alta Extrañeza son los que proveen mayor cantidad de información, pero el testigo de estas observaciones solo los reportará a una persona en quien confíe, dado que su probabilidad de ocurrencia es tan baja que lo creerán desquiciado.”


Por fortuna, Karina retomó el diálogo para anclarlo a la realidad común y comentó que para visitar la isla en cuestión se sale en catamarán desde el Puerto de Tigre, y añadió que el pan dulce que se hace en la isla es exquisito. 


Posteriormente, en respuesta a ciertas preguntas planteadas, Javier Stagnaro hizo un repaso histórico acerca del auge de los grupos de contacto en la Argentina en tiempos de la New Age, sobre todo bajo la fuerte influencia del grupo RAHMA de Perú que crearon Sixto Paz Wells y sus hermanos en 1974.


Hacia 1985 surgieron, entre otros, los grupos FUPEC de Dante Franch y ALFA de Francisco Checchi, cuyas actividades fueron ampliamente difundidas por la prensa de la época, incluidos los almuerzos de Mirtha Legrand.


En líneas generales, estos grupos compartían un ideario catastrofista acerca del inminente fin de los tiempos con devastadoras inundaciones, luego de las cuales intervendrían los extraterrestres organizando una “gran evacuación mundial” para la salvación de los elegidos. Este escenario milenarista actualmente puede parecer inverosímil, irreal, improbable. Sin embargo, en aquellos años diversos autores esotéricos promovían la idea de que el fin del mundo estaba a la vuelta de la esquina, lo que implicaba realizar un cambio de vida para prepararse interiormente al llegar el día de “la gran evacuación”. Javier resaltó que, lamentablemente, en algunos países hubo grupos contactistas con posturas extremas que derivaron en  movimientos sectarios, incluso con suicidios masivos.



Como siempre expresamos en estos resúmenes, estos candentes tópicos fueron solo una parte de lo charlado en este nuevo encuentro del Café Ufológico RIO54.


Con su habitual buen criterio, Mario Lupo desarrolló el concepto de que el Café Ufológico es una instancia superadora de comunicación ufológica: 


“El Café Ufológico no es un “grupo”, es un “espacio”, una revista abierta donde todos los temas son bienvenidos y cada persona que comenta algo es dar una vuelta de página.”


Y con estas premisas, nos vemos en la próxima reunión del primer jueves de marzo, para llenar de contenido las páginas en blanco de una nueva revista imaginaria, hasta entonces!


domingo, 24 de diciembre de 2023

Café Ufológico RIO54 de diciembre: PORQUÉ LOS EXTRATERRESTRES NO DEBEN USAR CORBATAS ROJAS



En noviembre, el Café Ufológico RIO54 debió realizar su reunión mensual de manera virtual debido a modificaciones estructurales en el local gastronómico donde nos reuníamos últimamente.


Esas reuniones virtuales son útiles para mantener la continuidad de los encuentros, pero no se comparan a las conversaciones personales cara a cara que desde el año 2010 son la esencia del Café Ufológico RIO54.


Elizabeth Nardini en primer plano.

Pero por fin en diciembre conseguimos un nuevo lugar para reunirnos, fue en la pizzería La Guitarrita (siempre en el barrio de Caballito), donde lo pasamos muy bien en un ambiente muy agradable, fuimos excelentemente atendidos ¡y esperamos poder continuar allí en adelante!


Al Café Ufológico RIO54 del jueves 7 de diciembre asistieron Luis Valle, Mariano Lioy, Carlos Gamboa, Rolando Luna, Aldo Barroso, Osvaldo García, Karina López, Luis Baynham, Damián Calvo, Nilva Macedo, Patricia Paillasse, Hugo Sampayo, Elizabeth Nardini, Patricia Sibar, Estela González, Lali Alvarez, Alejandro Merel, Carlos Spinelli, Javier Stagnaro, Gustavo Boggiano Shaman, Patricia López, Alcides González, Marina Prato, María Mercedes Vaccaro, como siempre con la coordinación de Mario Lupo y Rubén Morales.


Los coordinadores Mario y Rubén dieron la cordial bienvenida a los presentes en esta última reunión del año y luego tomaron la palabra quienes llegaron por primera vez, lo que ya es una sana costumbre del Café Ufológico RIO54.


Marina se presentó diciendo que siempre le interesaron estos temas, así como relató unos fuertes episodios relacionados con experiencias paranormales de precognición, lo que la llevó en años recientes a profundizar en la búsqueda de respuestas, motivo que la condujo a sumarse al grupo El Origen, al igual que su compañera María Mercedes, quien de niña vacacionaba con sus padres en Capilla del Monte, dónde no solo vio todo tipo de luces sino incluso recuerda que pasaron a su lado unas enigmáticas personas de más de 2 m de altura con cabello largo y rubio.


En la década de 1970 frecuentó la histórica sede del grupo Onife en Gaona 1312, y atesora una revista Cuarta Dimensión Nº1 autografiada por Fabio Zerpa.


Posteriormente completó su carrera de abogacía, para después estudiar psicología, counseling y finalmente parapsicología con el estimado amigo de RIO54 Dr. Alejandro Parra. 


“Decidí empezar un camino de expresión junto a los demás, por lo cual agradezco a ustedes y me agradezco por poder estar acá” -concluyó María Mercedes.


Cabe destacar que un camino similar hemos recorrido muchos otros, guardando por años la afición por los misterios en el ámbito privado, hasta que en determinado momento de la vida nos damos el necesario permiso interior para expresarnos públicamente y compartir con otros nuestras experiencias, porque por muy intensa que sea una vivencia o una convicción, solo adquiere su real valor cuando se la expresa.


Y compartir grupalmente lo callado es una experiencia liberadora que siempre deja una enseñanza para quien habla y también para quien escucha.


Mariano Lioy y Luis Valle.

Luego la conversación abrió su rumbo con agenda libre, como siempre en RIO54. Luis Baynham habló de los fantasmas que habría en antiguas casonas de Buenos Aires, Luis Valle amplió novedades sobre el proceso de divulgación de información en la nueva Ley de Defensa de Estados Unidos y Aldo Barroso relató un caso procedente de Sierra Bermeja, Puerto Rico (Puerto Rico es un país pródigo en relatos extraordinarios).


Básicamente el relato se refería a un aparato que aterrizó y del cual salieron dos seres de baja estatura y piel cenicienta (los llamados “grises”).


Tras varios movimientos retornaron al objeto y esta vez salió del mismo un personaje totalmente distinto: Se trataba de un hombre alto, pálido y canoso como si fuera albino, vestido de traje, lentes oscuros, zapatos negros y corbata roja.


Aldo reflexionó que un personaje de aspecto tan humano parece desentonar en un escenario típicamente ufológico.


Luis Baynham evocó el episodio sucedido en la playa Los Bateles de Conil de la Frontera, Cádiz, España, el 29 de septiembre de 1989. En esa oportunidad un grupo de jóvenes presenció a tres seres que parecían jugar con unas esferas de luz, uno de ellos era muy alto y de extraño aspecto, en cambio los otros dos parecían una clásica pareja de alemanes, que al verse descubiertos salieron corriendo.


Carlos Gamboa refirió que hacia los años 70, el empresario costarricense Enrique Castillo Rincón participó de un evento comercial en Bogotá, luego del cual, y a manera de distracción, lo invitaron a una meditación de contacto extraterrestre en las afueras de la ciudad. Una vez allí, contaba Castillo Rincón, descendió una nave y de esa nave salió un ser alto de aspecto europeo con un traje ajustado al cuerpo. De inmediato lo reconoció como su socio comercial en Caracas, hecho que quedó confirmado en el breve diálogo que tuvieron entonces, cuando su socio dijo ser pleyadiano y no venezolano…


Habla María Mercedes

Carlos se extendió sobre otros casos de contacto para finalmente concluir que hay muchos infiltrados extraterrestres entre nosotros, que son indistinguibles por su mera apariencia física.


En el mismo sentido, Estela recordó una extraña situación sucedida en Tucumán hace años, que le llegó por comentarios familiares directos. 


Un buen vecino había sufrido un accidente, fue llevado al hospital y al poco tiempo falleció. Lo curioso es que las autoridades del hospital se negaron rotundamente a entregar el cuerpo a la familia, con el argumento de que habían comprobado que ese cuerpo no era humano, que era necesario conservarlo en el hospital para su investigación…


Estas diversas historias, mas allá de que estén o no conectadas entre sí, más allá del anclaje en la realidad de cada una, son historias perturbadoras, dicho de otra manera son historias ufológicas que hubiéramos preferido no escuchar nunca, porque se oponen al estereotipo que tenemos en mente de “cómo debe ser y actuar” el “tripulante de un plato volador”.


¿Que nos dicen estos relatos, cual es su significado profundo? En principio, marcan la irrupción de lo bizarro, de esa sinrazón, ese sinsentido confuso que el gran Aimé Michel definió como “el festival del absurdo”. 


Ahora bien ¿sería “normal” ver salir un ser bajo, gris y cabezón de un plato volador y no lo sería si aparece por la escotilla un individuo de aspecto europeo con traje y corbata o bien con indumentaria militar, como se cuenta en otros casos? Tal criterio de normalidad sería una flagrante falacia sostenida en una imagen estereotipada del supuesto "extraterrestre modelo".


Estos episodios rayanos con el absurdo nos plantean contradicciones que invitan a reflexionar, a dejar atrás los estereotipos convencionales, son episodios que quiebran la racionalidad narrativa, algo parecido a lo que nos sucede al leer Alicia en el País de las Maravillas de Lewis Carroll o El Principito de Saint Exupéry.


Finalmente Mario Lupo subrayó la importancia social y cultural de espacios participativos como los Cafés Ufológicos. “Hablemos de espacios” -enfatizó- “porque la noción de grupo nos limita, en cambio hablar de espacios significa expandirse a un entorno que abarca muy diversos tópicos cuyo punto de unión es la expansión de conciencia."


"Nos une un tema que nadie puede resolver solo, por eso es fundamental compartir criterios y pensamientos ¡y este espacio de encuentro y conversación se va a mantener siempre gracias a ustedes que hacen posible que RIO54 exista!." 


"Nosotros solamente arrojamos una piedra al agua y la onda que se expande representa la amistad de mucha gente que conocemos y que aún estamos por conocer” -expresó Lupo. 


Como se comprenderá, hubo muchos temas más en este Café Ufológico RIO54 de diciembre, pero baste lo dicho como muestra de las posibilidades de diálogo que proponen estos encuentros.


Probablemente en enero realicemos reunión virtual por encontrarnos en período de vacaciones y en febrero retomaremos la actividad presencial. En cualquier caso nuestros amigos y amigas de siempre recibirán la información por los medios habituales.


¡Muy Feliz Navidad y Año Nuevo para todos los participantes del Café Ufológico RIO54 y sus respectivas familias! ¡Por un gran 2024!